Accionamiento por Correas Trapeciales
La figura muestra la acción de las fuerzas en un accionamiento por correas trapeciales. Si el ángulo de la cuña fuera menor de prox α= 200, se produciría autorretención y una correa de este tipo, al trabajar, sufrirla destrozos y tendría un mal rendimiento. Por eso, el ángulo de cuña se ha fijado en α= 36°.
Puesto que una correa trapecial se curva al marchar sobre las poleas, resulta estirada por el exterior y comprimida por el interior, disminuyendo el ángulo de la cuña con respecto al que tiene en el tramo recto, y ello tanto más cuanto más pequeñas son las poleas. Por otra parte, como la correa debe quedar muy ajustada en los flancos, la garganta de la polea ha de ajustarse en la forma correspondiente. Un dimensionado incorrecto se traduce en una disminución de la potencia a transmitir o en un rápido desgaste de la correa.
Las correas trapeciales sin fin son correas de goma en cuyo interior se incluye un haz de hebras de cuerda (cuerda paquete en varias capas unas sobre otras), como elemento de tracción en la zona sometida al esfuerzo principal. Las hebras de cuerda están incrustadas en el caucho, cuyo cuerpo está revestido con tejido. Puesto que se vulcanizan en moldes, los perfiles y están normalizados y condicionados a la fabricación. En la construcción de automóviles, y recientemente también en la fabricación de maquinaria, se han sustituido las correas trapeciales normales sin fin, por las correas trapeciales estrechas sin fin.
Las correas trapeciales normales abiertas, están formadas por telas engomadas enrolladas. Para los accionamientos regulables sin escalones, se emplea también un tipo de correa trapecial ancha, dentada con un ángulo (α = 30...33°. Su forma corresponde a la de las correas trapeciales normales con cuerda paquete. Las correas trapeciales pueden marchar con temperatura de servicio de hasta aproximadamente 80° C.
Poleas Trapeciales
Las gargantas para las correas trapeciales normales están normalizadas, para las correas trapeciales estrechas. Las poleas pueden ser fundidas, soldadas o, como ocurre en la construcción de automóviles, estampadas en serie. La figura muestra diversos tipos. Para el dimensionado de los cubos y de los. En lo posible, los diámetros mínimos de las poleas no deben ser menores que los mínimos normalmente admisibles. Si esto debe ocurrir excepcionalmente, hay que disminuir la potencia a transmitir. Para garantizar una larga duración de la correa, los flancos de garganta deben estar lisos y limpios.
La figura muestra poleas trapeciales de dos piezas ajustables. Girando las tuercas o eliminando discos de suplemento se aumenta el diámetro efectivo. De este modo, pueden volverse a tensar las correas trapeciales después del alargamiento permanente. No obstante, con ello se varia un poco la relación de transmisión. Los accionamientos de varias correas se pueden retensar variando la distancia entre ejes, a no ser que se trate de accionamientos con rodillos de tensión. Para este cometido sirven entonces las poleas cilíndricas planas que, desde fuera o desde dentro, se sientan contra el tramo en vacío. Al montar un rodillo tensor interior, se disminuye el ángulo de abrazamiento, pero la correa no se curva en sentido contrario al de la marcha y su duración en servicio es mayor.
En la figura se representan mitades de poleas ajustables, para correas trapeciales normales o estrechas, mostrando su modo de funcionamiento.
Cálculo
La figura muestra el esquema de un accionamiento por correas trapeciales. Se entiende por transmisión la relación entre la velocidad de la polea motriz y la de la accionada. Para simplificar, aquí se tomará siempre la relación entre la velocidad nk de la polea pequeña y la velocidad nk
de la polea grande:
k' g wg* wk
• nk en r.p.m,: velocidad de la polea pequeña.
• ng en r.p.m.: velocidad de la polea grande;
• dwk: diámetro efectivo de la polea pequeña;
• dwg: diámetro efectivo de la polea grande.
Por el contrario, para las correas trapeciales normales sin fin está normalizado el largo interior L.. En este caso es Li = Lw - c para:
Ejemplo de denominación de una correa trapecial normal 8, con Li = 710 mm: correa trapecial 8 x 710 DIN 2.215.
Las correas deben montarse con una tensión previa tal que no se produzca un resbalamiento mayor del 1 %. En el caso de accionamientos de varias gargantas, las longitudes efectivas de cada una de las correas no tienen que variar entre sí más de « 0,15 %; de lo contrario, quedará
sobrecargada la más corta. Si no se dispone de poleas de ajuste que permitan el retensado, o no existen rodillos de tensión, debe preverse la posibilidad de ajustar la distancia entre ejes con x _ 0,03 Lw e y 0,015 Lw.
La distancia final entre ejes e puede calcularse transformando la ecuación 235, en donde la pequeña variación del ángulo abrazamiento (3, en general, no tiene ninguna importancia. La DIN 7.753 recomienda como distancia entre ejes e > 0,7(dwg + dwk) pero e < 2(dwg+ dwk).
Al dimensionar el accionamiento deben tenerse en cuenta las sobrecargas y los esfuerzos de choque producidos por el trabajo, así como la duración diaria de este último, de la cual depende la duración real de la correa. Por eso, la potencia P a transmitir debe multiplicarse por un factor de carga c2. Este depende esencialmente del tipo de las máquinas motrices y de trabajo y no considera las condiciones especiales del mismo como rodillos de tensión o de ajuste, ni tampoco las condiciones de abrazamiento desfavorables. En tales casos especiales y también cuando los momentos de arranque sean más elevados o exista mayor frecuencia de arranques y paradas, deben aumentarse correspondientemente los valores de c2. Si ya se ha designado con P la punta de potencia máxima posible, entonces debe determinarse c2 según la columna "accionamientos ligeros".
En la figura se dan normas para la elección del perfil de las correas trapeciales estrechas, en relación con la potencia de choque ) P X c2, con la velocidad nk de la polea pequeña y con el diámetro efectivo dwk.
En la tabla se dan, según normas DIN, las potencias nominales PN a transmitir por una correa, en relación con la velocidad v de la misma, Están referidas a los accionamientos con correas trapeciales estrechas, con diámetros efectivos medios gruesos, con los cuales, para velocidades reales de 6000 ... 2800 r.p.m., puede alcanzarse una velocidad de correa v = 40 m/s y, por tanto, con un ángulo de abrazamiento β 180°, una transmisión i = 1.
En el caso de correas trapeciales normales se da PN para diámetros efectivos dwk 3 dwk mín hasta v 30 m/s. Esto es, para:
Cuanto más pequeño es el ángulo de abrazamiento b, tanto más pequeña es la potencia que puede transmitir Un accionamiento por correas. Esta influencia se recoge mediante un factor angular cr
Además, las posibilidades de la transmisión aumentan con la longitud real Lw, porque entonces es más pequeña la frecuencia de flexión y aumenta correspondientemente la duración de la correa.
Puede calcularse el número de correas necesario
• P en kW: potencia a transmitir
• PN en kW: potencia nominal de una correa, según tabla, factor angular, según tabla.
• C1 : factor angular según tabla.
• c2 : factor de carga, según tabla.
• c3: factor de longitud para correas trapeciales estrechas, según tabla para las correas trapeciales normales es c4 = dwk , /d wk min. . cuando d wk < d wk min de lo contrario , siempre c, = 1 x wk min
• c5: factor de transmisión para accionamientos de correas trapeciales estrechas, según tabla, para correas trapeciales normales es c5 = 1,
Las correas trapezoidales están hechas de caucho con cordones de poliéster o aramida para transmitir potencia mecánica. Las correas trapezoidales se envuelven sobre los cables, que están destinados a la transmisión de la fuerza del conductor a la polea conducida, transmitiendo así la potencia. El número y el tipo de cables dependen de la potencia a transmitir. La capa de goma de la correa trapezoidal ayuda a transmitir la fuerza del cable a las capas laterales
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