Esfuerzos mecanicos - Tipos de cargas
La solicitación exterior a que está sometido cualquier elemento de una estructura o de una máquina está constituida por:
- Fuerzas activas o directamente aplicadas, llamadas cargas.
- Fuerzas reactivas o reacciones de las ligaduras.
El conjunto de ambas clases de fuerzas deben constituir un sistema nulo para que la pieza se encuentre en equilibrio.
Atendiendo al área de la superficie sobre la que actúan las cargas se clasifican en:
1) Cargas concentradas: Son aquéllas que actúan sobre una superficie muy pequeña en relación con las dimensiones de la pieza. Son, por tanto, asimilables a fuerzas puntuales. Un ejemplo de carga concentrada es la ejercida sobre el tablero de un puente por cada una de las ruedas de un vehículo.
2) Cargas distribuidas o repartidas: Son aquéllas que se encuentran repartidas, uniforme o variablemente, sobre áreas determinadas del elemento en estudio. Son ejemplos de cargas repartidas, el peso propio de una viga, el empuje de las tierras sobre un muro, la acción del viento sobre un edificio, etc
Otras formas de clasificar las cargas, pero de menor incidencia en este tema es clasificarlas por:
a) En función de la continuidad:
Cargas permanentes, que actúan en todo momento y son constantes en magnitud y posición, como el peso propio de una viga.
Sobrecargas, son cargas que actúan de modo temporal pudiendo variar tanto en magnitud como en posición, como el viento, la nieve u otros esfuerzos en máquinas.
b) Según su forma de aplicación:
Cargas estáticas, cuando se aplican lentamente y no aparecen fuerzas de inercia.
Cargas dinámicas, cuando se aplican bruscamente, o cuando el valor de la carga varia en función del tiempo de forma continuada, lo que provoca la aparición de fuerzas de inercia acompañadas de fenómenos vibratorios.